La ambición de Noruega: usar solo energía limpia en 2050

Noruega tiene unos recursos hídricos envidiables y saca de ellos una buena parte de su capacidad energética. Las centrales hidroeléctricas son comunes en el país , hasta el punto de que existen en torno a 50.

De esta forma, el uso de energía limpia en Noruega no es un fenómeno marginal ni mucho menos. Es más, las políticas del gobierno y la concienciación de los ciudadanos ha dado lugar a un derrotero ecológico. Hay que recordar también que la nación nórdica ha adoptado con entusiasmo el coche eléctrico. De hecho, Europa es el primer país con más vehículos de este tipo circulando.

Lo cierto es que no es extraño que Noruega aparezca ligada a noticias relacionadas con la preservación del medio ambiente. Ahora la nota la pone un think tank energético nacional, Energi Norge. Desde esta entidad apuntan que el país podría operar solo con energía limpia para 2050.

Los responsables de Energie Norge inciden en el gran potencial que tiene el uso de energía limpia en Noruega para resolver dos problemas. Uno de ellos está claro y se trata de la lucha contra el cambio climático. Tal vez "resolver" no es el mejor verbo que se puede emplear, pero desterrar las emisiones sí serviría como paliativo, al menos a nivel local.

El segundo problema que se afrontaría transformando por completo el modelo energético noruego es la pérdida de empleo. Esta cuestión tiene un origen sencillo. El país escandinavo es un importante productor de petróleo, con lo que muchos empleos dependen de esta industria. Cuando los pozos se agoten, todas las personas dedicadas al sector tendrán que reconvertirse. Y, si en lugar de importar petróleo, el país apuesta por seguir obteniendo su propia energía, en este caso renovable, será más fácil una reconversión de los trabajadores y evitar así las oleadas de desempleados.

El think tank se ha propuesto trabajar para que Noruega se convierta en 2050 en el primer país que solo usa energía limpia. Han creado un programa para conducir esta transición y afirman que más de 100 compañías ya han firmado. Entre las propuestas del plan está la carga gratuita para vehículos eléctricos y la exención de impuestos para sus propietarios.

En realidad, el programa está en línea con la política del gobierno noruego. Este mismo año, las autoridades anunciaron que las calefacciones de los edificios no podrán utilizar petróleo a partir de 2020. La medida involucra a edificaciones públicas y privadas. Al mismo tiempo, el debate está abierto sobre la prohibición de los coches de diésel y gasolina para 2025.